Retratamiento de conducto
Importancia: El retratamiento de conducto se realiza cuando un diente que ha tenido un tratamiento de conducto previo se vuelve a infectar o presenta problemas no resueltos. Este procedimiento permite salvar el diente y eliminar la nueva infección.
Evaluación inicial:
El retratamiento de conducto se realiza cuando un tratamiento anterior ha fallado, lo que puede deberse a un sellado incompleto, una nueva infección o conductos no tratados.
Procedimiento:
Evaluación Inicial: Examen clínico y radiografías para evaluar el estado del tratamiento previo.
Acceso al Conducto: Se retira la restauración existente y se accede al conducto radicular.
Limpieza y Desinfección: Se eliminan la gutapercha y otros materiales del conducto, y se limpia y desinfecta nuevamente el conducto radicular.
Relleno y Sellado: El conducto se rellena y sella nuevamente con gutapercha y selladores.
Restauración: Se coloca una nueva corona o restauración para proteger y fortalecer el diente.
Instrumentos: Explorador dental, radiografías, limas endodónticas, gutapercha, selladores.
Duración: Aproximadamente 60 a 90 minutos, con varias citas si es necesario.
Incomodidades: Dolor y sensibilidad durante y después del procedimiento, manejados con anestesia local y analgésicos.
Riesgos y fallas: Riesgo de infección recurrente, fractura del diente si no se coloca una restauración adecuada.
Resultados esperados: Con el retratamiento, se espera eliminar cualquier infección residual y sellar el diente de manera eficaz para que funcione como un diente natural.







