Colocación de Implantes Cigomáticos

Importancia: Los implantes cigomáticos son una alternativa para pacientes con una pérdida ósea severa en el maxilar superior. Estos implantes se anclan en el hueso cigomático (hueso de la mejilla), proporcionando una base sólida para las prótesis dentales.

Evaluación inicial:

El dentista evalúa si el paciente presenta una pérdida ósea extrema en el maxilar superior, lo que hace necesario el uso de implantes cigomáticos. Se toman tomografías computarizadas para planificar la colocación del implante, que se ancla en el hueso cigomático (pómulo) en lugar del maxilar.

Procedimiento:

  1. Evaluación Inicial y Planificación: Examen clínico y tomografía computarizada para planificar la colocación del implante cigomático.

  2. Anestesia General o Sedación: Se administra anestesia general o sedación consciente para el confort del paciente durante la cirugía.

  3. Incisión y Acceso al Hueso Cigomático: Se realiza una incisión en la encía para exponer el hueso maxilar y cigomático.

  4. Preparación del Lecho del Implante: Se utilizan fresas especiales para preparar el lecho del implante en el hueso cigomático.

  5. Colocación del Implante: El implante cigomático se inserta a través del maxilar hasta anclarse en el hueso cigomático.

  6. Cierre del Sitio: Se colocan tapas de cicatrización sobre los implantes y se sutura la encía.

Instrumentos: Bisturí, fresas quirúrgicas, implante cigomático, suturas.

Duración: Aproximadamente 1 a 3 horas.

Incomodidades: Dolor y sensibilidad postoperatoria, hinchazón y posible hematoma, manejados con analgésicos y antiinflamatorios.

Riesgos y fallas: Riesgo de infección, daño a estructuras anatómicas cercanas, fallo del implante si no se integra adecuadamente.

Resultados esperados: Estabilidad del implante incluso en pacientes con pérdida ósea severa, permitiendo la colocación de una prótesis fija.